Si eres mujer y mayor de 45 años, es muy probable que tengas cálculos biliares, también conocidos como piedras biliares.
Con seguridad no eres la única que los sufre.
Para darte un dato estadístico, aproximadamente uno de cada seis alemanes padece cálculos en la vesícula biliar y las mujeres tienen casi el doble de riesgo que los hombres.
Sin embargo, la mayoría de las personas no se dan cuenta del valor que tiene la bilis, de ahí que puedan vivir durante años con piedras en el cuerpo.
No obstante, cuando producen dolor, es vital actuar con rapidez.
Por qué necesitamos la bilis?
La bilis es un líquido muy especial, elaborado a partir de:
- Agua.
- Colesterol.
- Ácidos biliares.
- Bilirrubina, un pigmento biliar.
La vesícula biliar y los conductos biliares forman un complejo sistema de órgano hueco que está lleno de bilis y que facilita su transporte para ser utilizado en el intestino delgado.
En términos populares, a menudo el sistema completo que consiste de vesícula biliar, bilis y conductos biliares, se conoce como «bilis».
Para una mejor comprensión de esta área, es importante distinguir entre los términos anteriores.
El papel de la bilis en la digestión de las grasas
La bilis es vital para la digestión de las grasas.
Se produce en y por las células del hígado y es secretada mediante pequeños conductos biliares.
Muchos de los pequeños conductos biliares se unen al gran conducto biliar a través del cual la bilis fluye hacia el duodeno.
Una parte de la bilis se almacena y concentra en la vesícula biliar, un cuerpo en forma de bolsa que está conectado con el gran conducto biliar.
Es el gran conducto biliar con su estrecha abertura quien facilita el transporte de la bilis.
Cuando se necesita bilis para la digestión de las grasas, la cantidad necesaria de bilis es proporcionada por la vesícula biliar.
La contracción de la vesícula biliar, permite que la bilis pase del gran conducto biliar hasta el duodeno.
Aquí, la bilis se añade al quimo, que llega desde el estómago hacia el intestino.
Mediante la bilis la grasa y aceites «emulsionan» con el quimo, es decir se mezclan.
De lo contrario las grasas no se pueden disolver.
La función de la bilis es comparable a la de un detergente en la cocina con platos llenos de grasa.
En ausencia de bilis, la digestión de las grasas y vitaminas se vuelve sumamente complicada.
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¿Las quejas son típicas de los cálculos biliares?
Y ahora llegamos a los cálculos biliares.
El cambió en la composición de los componentes de la bilis, da origen a que la bilis se «aglutine» solidificándose, dando como resultado los cálculos biliares.
Dependiendo del origen las piedras biliares llevan diferentes nombres:
- Colecistolitiasis: cuando las piedras están en la vesícula biliar
- Coledocolitiasis: son cálculos biliares que se localizan en el conducto biliar.
Los cálculos o piedras biliares pueden formarse a partir de:
- Colesterol.
- Bilirrubinato cálcico.
- Bilirrubina.
- Mixtos.
La presencia de cálculos biliares para muchas personas no es problema, porque no las sienten.
Sin embargo, algunos pacientes se quejan de náuseas o sensación de llenura.
A medida que las piedras biliares aumentan de tamaño y cantidad, la piel y la esclerótica de los ojos pueden fácilmente mostrar un tono amarillento.
Un análisis de sangre puede dar indicaciones de aumento de enzimas hepáticas.
Algunas piedras biliares pueden también causar dolor extremo, que puede irradiarse hacia el abdomen, la parte posterior o el hombro, por ejemplo, si se obstruye el conducto biliar.
Es lo que se conoce como ataque biliar y son sumamente dolorosos.
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Este cólico biliar tiene que ser aliviado rápidamente.
En algunos pacientes, también puede inflamarse el conducto biliar, dando lugar a lo que se conoce como colangitis.
Si es la vesícula biliar la que sufre inflamación, se habla de colecistitis, en el caso del páncreas, pancreatitis.
¿Cómo aliviar los cálculos biliaresl?
La ventaja de los cálculos biliares es que se pueden detectar con rapidez y fiabilidad en un simple examen de ultrasonido.
El uso de la colangiopancreatografía endoscópica retrógrada, permite efectuar un ultrasonido desde el interior.
Este análisis se utiliza para detectar piedras en el conducto biliar.
Con la ERCP (por sus siglas en ingles), el especialista puede mirar en el conducto biliar mediante un endoscopio desde el interior y ELIMINAR las piedras directamente.
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Sin embargo, en la mayoría de los casos la vesícula biliar no debería ser eliminada.
La operación para eliminar la vesícula biliar actualmente es un procedimiento de rutina.
Se usa el método conocido como ‘ojo de cerradura’, que es una cirugía laparoscópica mínimamente invasiva para extirpar la vesícula biliar.
Para esto, se practican pequeñas incisiones en la pared abdominal, que permiten introducir instrumentos quirúrgicos, además de un laparoscopio.
La vida después de haber sido eliminada la vesícula biliar?
Para la mayoría de las personas la eliminación de la vesícula biliar tiene un efecto notable.
Deben procurar mantener una dieta equilibrada y en gran medida prescindir de alimentos grasos.
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Si bien el hígado continúa produciendo bilis, no obstante, al haber sido retirado el reservorio, la cantidad de bilis necesaria para la digestión es menor.
Luego de una colecistectomia, es conveniente por un lado, incluir aceite de coco y por otro sales biliares.
De esa forma, se puede minimizar el impacto causado por la pérdida irreparable de la vesícula biliar, en la digestión de las grasas.
